Yo nací en los años 50. Tengo la edad suficientes como para recordar la dictadura.
Lo que se sentía -lo que yo sentía- ante las condenas a muerte, las cargas policiales, las mentiras, las injusticias, la infamia...
Ahora, en medio de esta... oleada de maldad que está aplastando todo cuanto de bueno y decente había en nuestra sociedad, vuelvo a sentir lo mismo.
Miedo. Asco. Rabia. Indignación. Dolor. Un dolor infinito.
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